Fondos de inversión y grandes empresarios, muchos de los propietarios de los grandes grupos de residencias de mayores
La alta rentabilidad de los centros geriátricos atrae cada día a más fondos de inversión al sector geroasistencial. DomusVi, Orpea y Amavir son tres de los grandes grupos de centros de mayores que pertenecen a grandes inversores.
En España se estima que la población mayor de sesenta y cinco años ya representa a más del 9,1 por ciento, según fuentes del Instituto Nacional de Estadística, un crecimiento del 2,39 por ciento desde el año 2010.
Ante una población que, con el paso de los años, requiere cuidados personalizados a causa de los problemas de salud o las dificultades propias de la tercera edad para llevar a cabo de forma autónoma las actividades para la vida diaria y el aumento de la dependencia de familiares o cuidadores, es de esperar que la demanda de plazas residenciales para mayores vaya en un aumento constante. En este momento, según datos del Imserso, se estima que en España hay un déficit de más de setenta mil plazas, de ahí que en muchos casos la asignación de una plaza pública a una persona mayor se retrase más de lo deseado.
A fin de cubrir la alta demanda, muchos fondos de inversión, aseguradoras y grandes empresarios han encontrado una fuente de negocio muy rentable con los cuidados geriátricos. En números, se estima que a comienzos del año 2019, cinco de los grandes grupos residenciales reunían algo más del veinte por ciento de todas las plazas residenciales de nuestro país.
Los grupos de inversión y los centros residenciales en España
Las residencias DomusVi son, en España, la primera empresa del sector geroasistencial y cuenta con veinticinco mil plazas en sus más de doscientas residencias y centros de mayores. Su plantilla está compuesta por más de veinte mil trabajadores y pertenece, a través de DomusVi Francia al grupo inversor británico Intermediate Capital Group (ICG) desde el año 2017.
Los centros geriátricos de Orpea, de origen francés, están presentes en más de veinte países y ofrecen más de cien mil plazas para personas mayores. En España el grupo cuenta con casi nueve mil. El grupo propietario de Orpea es propiedad tanto del fondo CPPIB, canadiense, y de la familia Peugeot.
Las más de seis mil plazas de Amavir están atendidas por más de cuatro mil empleados y es el grupo Mulliez (conocido por sus grandes centros de distribución: Decathlon, Leroy Merlin o Alcampo) el propietario de los centros.
El grupo de residencias de mayores Vitalia cuenta con casi siete mil plazas residenciales y algo más de tres mil empleados. También desde el año 2017, pertenece al grupo CVC, el cual cerró la operación con el fondo español de capital riesgo Portobello.
Otros grandes inversores en residencias de la tercera edad
Pero no solo los grandes fondos de inversión se han sumado a la compraventa de centros de mayores, por su parte, constructoras como Clece o Sacyr han diversificado sus inversiones.
En el caso de Clece, a través de su marca Clece Vitam, gestiona casi ciento cincuenta residencias de la tercera edad y alrededor de noventa centros de día por toda España, dando cobertura a más de diecisiete mil personas mayores. Por su parte, Sacyr Social, filial de la empresa Sacyr, ofrece cuidados residenciales a algo más de mil residentes mayores con casi la misma cifra de trabajadores a su cargo.
Y otro caso de interés es el de las residencias de mayores de Ballesol, un grupo formado mayoritariamente por capital de la aseguradora Santalucía y cuya andadura pasa ya los treinta años de experiencia. En su caso, disponen de más de siete mil plazas residenciales atendidas por más de tres mil empleados.
La oportunidad para los grandes empresarios y fondos de inversión
Las previsiones no se equivocan y los datos están sobre la mesa: las residencias de mayores son un negocio rentable y en continuo crecimiento, a pesar de los estragos causados por la crisis de la COVID-19 tanto en los usuarios como en los propietarios —como se comenta en este artículo—.
Así pues, podemos afirmar que hacerse con la compra o el traspaso de una residencia de mayores resulta atractivo tanto para grandes empresas, fondos y empresarios. Sin embargo, la clave para obtener la mayor rentabilidad posible y optimizar los recursos está en contar con la ayuda de profesionales expertos en el sector geriátrico que estudien cada proyecto de forma individual de forma que podamos garantizar que el beneficio se fundamenta en un sistema de cuidado que garantice la calidad y satisfacción de los clientes a largo plazo.